Esa mezcla de anticipación y, a veces, un ligero recelo, es una sensación muy común, especialmente cuando pensamos en tratamientos o si vamos con niñxs.

En Flores Ohana, creemos que la estética no es solo cuestión de belleza, sino de 𝗯𝗶𝗲𝗻𝗲𝘀𝘁𝗮𝗿. Por eso, colaboramos con la clínica de ortodoncia Sampietro y Beltrán para transformar su sala de espera, aplicando los principios de la neuroestética.

El objetivo era crear un ambiente que transmitiera calma y confianza.

La clínica dental, Sampietro y Beltrán, ubicada en la Calle José Luis Pomarón de Zaragoza, quería actualizar su sala de espera, reemplazando las pantallas con vídeos repetitivos por un 𝗲𝗻𝘁𝗼𝗿𝗻𝗼 𝗺á𝘀 𝗮𝗰𝗼𝗴𝗲𝗱𝗼𝗿.

Juntos decidimos incorporar el color 𝘃𝗲𝗿𝗱𝗲, que en la neuroestética, se asocia con la naturaleza, la calma y la armonía, creando un espacio más sereno y confortable.

Pero no nos quedamos solo en el color.

Para potenciar aún más la sensación de bienestar, diseñamos unos impactantes cuadros vegetales redondos. Las formas curvas y la presencia de la naturaleza, elementos clave en la neuroestética, contribuyen a la relajación y reducen el estrés.

🌿El resultado es una sala de espera que invita a la 𝘁𝗿𝗮𝗻𝗾𝘂𝗶𝗹𝗶𝗱𝗮𝗱 y a la 𝗰𝗼𝗻𝗳𝗶𝗮𝗻𝘇𝗮, creando una experiencia mucho más positiva para pacientes de todas las edades.

Gracias a Gemma y a todo el equipo, porque todas son encantadoras, además de facilitarnos el espacio y todo cuanto necesitáramos, siempre tienen una gran sonrisa.

Según colocábamos el jardín, se asomaban por la vidriera del despacho, con ojos maravillados, como niñas con juguetito nuevo.

Estamos orgullosas de haber contribuido a mejorar la experiencia de los pacientes de vuestra consulta, de verdad!!.